Descripción
Los bosques de manglares son formaciones intermareales marinas y estuarinas, que pueden desarrollarse tanto a orillas del mar como en ambientes fluviales a decenas de kilómetros río arriba. Las especies que los conforman tienen la capacidad de vivir en ambientes salinos y salobres, con tolerancia a sumersiones periódicas y sobre suelos poco desarrollados . Para el establecimiento y desarrollo de los manglares es necesario que se den diversas condiciones. En Venezuela, donde la temperatura ambiental y del agua son relativamente altas y estables, los factores determinantes están asociados con la salinidad, el ámbito mareal, el tipo de sustrato, el perfil de la costa, el grado de protección al oleaje y las corrientes marinas . Los planos lodosos, en ciénagas e islas, donde los suelos arcillosos son inmaduros y están saturados de agua por largos períodos, son ambientes propicios para esta formación . En el caso de la salinidad, la tolerancia de las diferentes especies abarca el intervalo desde 0 hasta 90 ‰ (partes por mil), siendo la salinidad promedio del mar 35‰ .
En la región del Caribe, el proceso de colonización y desarrollo de un bosque de manglar es iniciado por el mangle rojo (Rhizophora mangle), especie caracterizada por sus raíces en forma de zancos que se arraiga bien en suelos blandos. En lagunas costeras, los mangles rojos típicamente están ubicados en las zonas de menor salinidad, expuestos al mar, mientras que en las zonas interiores con suelos hipersalinos (> 55 ‰) domina el mangle negro (Avicennia germinans), caracterizado por poseer neumatóforos que le permiten realizar intercambio de gases en suelos pobres. El mangle blanco (Laguncularia racemosa) se sobrepone con las dos especies anteriores, especialmente en suelos más estables. Por su parte, el mangle botoncillo (Conocarpus erectus) está más en contacto con la vegetación terrestre y tiende a estar presente en zonas áridas (Medina & Barboza 2006, Sánchez-Arias et al. 2010). Los bosques de mangle alcanzan alturas de 3-40 m y pueden ser monoespecíficos, o presentarse en combinaciones de más de uno de ellos (Foto 1
En el dominio continental de Venezuela, las áreas de manglar están circunscritas a dos unidades geomorfológicas: lagunas costeras y planos aluviales expuestos a las mareas. En los planos aluviales pueden distinguirse tres unidades: 1) las de deposición sedimentaria marina, como en la ciénaga de Los Olivitos, golfo de Morrocoy y golfo de Paria; 2) pantanos deltaicos con deposición marino-fluvial, como el río San Juan y el golfo de Paria; y 3) deltas pantanosos con deposición predominante aluvial, como en el delta del Orinoco .
Los manglares proveen importantes servicios ecosistémicos a la sociedad, destacando su capacidad de prevenir la erosión costera y su alta productividad biológica que sustenta a peces, moluscos, crustáceos y otros invertebrados. Junto con los arrecifes de coral y las praderas marinas dominadas por la planta acuática Thalassia testudinum, los manglares son los ecosistemas marinos de mayor importancia para la fauna costera del mundo. Se considera que gran parte de las pesquerías dependen del manglar y de su capacidad para producir nutrientes orgánicos y servir de criaderos .
En la región del Caribe, el proceso de colonización y desarrollo de un bosque de manglar es iniciado por el mangle rojo (Rhizophora mangle), especie caracterizada por sus raíces en forma de zancos que se arraiga bien en suelos blandos. En lagunas costeras, los mangles rojos típicamente están ubicados en las zonas de menor salinidad, expuestos al mar, mientras que en las zonas interiores con suelos hipersalinos (> 55 ‰) domina el mangle negro (Avicennia germinans), caracterizado por poseer neumatóforos que le permiten realizar intercambio de gases en suelos pobres. El mangle blanco (Laguncularia racemosa) se sobrepone con las dos especies anteriores, especialmente en suelos más estables. Por su parte, el mangle botoncillo (Conocarpus erectus) está más en contacto con la vegetación terrestre y tiende a estar presente en zonas áridas (Medina & Barboza 2006, Sánchez-Arias et al. 2010). Los bosques de mangle alcanzan alturas de 3-40 m y pueden ser monoespecíficos, o presentarse en combinaciones de más de uno de ellos (Foto 1
, Foto 2
). También hay otras especies frecuentemente asociadas a los bosques de manglar y con cierta tolerancia a la salinidad, como Pterocarpus officinalis, Montrichardia arborescens, Acrostichum aureum y Crinum spp. . Al desarrollarse, las comunidades de manglar transforman el sustrato y generan una sucesión entre el mar y la tierra firme.
En el dominio continental de Venezuela, las áreas de manglar están circunscritas a dos unidades geomorfológicas: lagunas costeras y planos aluviales expuestos a las mareas. En los planos aluviales pueden distinguirse tres unidades: 1) las de deposición sedimentaria marina, como en la ciénaga de Los Olivitos, golfo de Morrocoy y golfo de Paria; 2) pantanos deltaicos con deposición marino-fluvial, como el río San Juan y el golfo de Paria; y 3) deltas pantanosos con deposición predominante aluvial, como en el delta del Orinoco .
Los manglares proveen importantes servicios ecosistémicos a la sociedad, destacando su capacidad de prevenir la erosión costera y su alta productividad biológica que sustenta a peces, moluscos, crustáceos y otros invertebrados. Junto con los arrecifes de coral y las praderas marinas dominadas por la planta acuática Thalassia testudinum, los manglares son los ecosistemas marinos de mayor importancia para la fauna costera del mundo. Se considera que gran parte de las pesquerías dependen del manglar y de su capacidad para producir nutrientes orgánicos y servir de criaderos .
Distribución
Los bosques de manglar se distribuyen a lo largo de las costas e islas de Venezuela en forma discontinua (Figura 1). El bosque de manglar más occidental es la Laguna de Cocinetas en la península de la Guajira en el estado Zulia (Foto 3
Los bosques de manglar más extensos, estructuralmente complejos y diversos de Venezuela son los ubicados en la planicie deltaica del río Orinoco y sur de Paria . Pueden llegar a formar cinturones continuos, interrumpidos sólo por ríos y pequeños cursos de agua, desde Yaguaraparo, en el estado Sucre, hasta Guyana. Estos bosques son los más altos del país, con portes entre 25 y 35-40 m , lo que puede observarse al contrastar las fotos 1-5.
En algunas áreas se desarrollan bosques de manglares enanos, posiblemente asociados a factores edáficos . Este parece ser al caso en la laguna Aguas Blancas al norte del parque nacional Turuépano, donde se cree existe una alta concentración natural de aluminio .
), mientras que el ubicado más al oriente está al sur de la boca del río Orinoco en el estado Delta Amacuro. Entre estos dos extremos, se observan bosques de manglar prácticamente en todos los estados costeros (Tabla 1), resaltando las desembocaduras de los grandes ríos que surten el Golfo Triste, el golfo de Cariaco, las lagunas de Píritu, Unare, Tacarigua y Carenero (Foto 4
, Foto 5
), la costa de los estados Carabobo y Falcón, y la costa del lago de Maracaibo. En la región insular se presentan bosques de manglar en la isla de Margarita (Foto 2
) y en el archipiélago de Los Roques, así como pequeños parches en las islas de Aves, La Orchila, La Tortuga, La Blanquilla, Los Hermanos y Los Testigos .
Los bosques de manglar más extensos, estructuralmente complejos y diversos de Venezuela son los ubicados en la planicie deltaica del río Orinoco y sur de Paria . Pueden llegar a formar cinturones continuos, interrumpidos sólo por ríos y pequeños cursos de agua, desde Yaguaraparo, en el estado Sucre, hasta Guyana. Estos bosques son los más altos del país, con portes entre 25 y 35-40 m , lo que puede observarse al contrastar las fotos 1-5.
En algunas áreas se desarrollan bosques de manglares enanos, posiblemente asociados a factores edáficos . Este parece ser al caso en la laguna Aguas Blancas al norte del parque nacional Turuépano, donde se cree existe una alta concentración natural de aluminio .
Bosques de manglares - Distribución en 2010, Huber y Oliveira-Miranda (2010)
Cambios en la distribución
Superficie estimada (km2) por estado:
(Tabla 1)
(Tabla 1)
Estado | 1988 | 2010 | Diferencia | |
---|---|---|---|---|
Anzoátegui | 0 | 13 | 13 | ▲ |
Aragua | 0 | 6 | 6 | ▲ |
Carabobo | 0 | 31 | 31 | ▲ |
Delta Amacuro | 2,587 | 4,513 | 1,926 | ▲ |
Dependencias Federales | 224 | 219 | -5 | ▼ |
Falcón | 220 | 273 | 53 | ▲ |
Miranda | 18 | 162 | 144 | ▲ |
Monagas | 744 | 1,880 | 1,136 | ▲ |
Nueva Esparta | 157 | 39 | -118 | ▼ |
Sucre | 1,146 | 1,090 | -56 | ▼ |
Trujillo | 0 | 24 | 24 | ▲ |
Yaracuy | 0 | 8 | 8 | ▲ |
Zulia | 356 | 492 | 136 | ▲ |
Total | 5,452 | 8,750 | 3,298 |
Superficie en 1988 (km2): 5,452
Superficie en 2010 (km2): 8,750
(Figuras 1a y 1b)
Superficie en 2010 (km2): 8,750
(Figuras 1a y 1b)
Riesgo de colapso a nivel nacional
Riesgo de colapso a nivel nacional:
PREOCUPACIÓN MENOR
Grado de amenaza 2010:
(Figura 1c)
(Figura 1c)
Costa Occidental
Costa Central
Costa Oriental
Riesgo de colapso por localidad:
(Tabla 2)
(Tabla 2)
Criterios | |||
---|---|---|---|
Localidad | Extensión (km2) | D2 | Situación por localidad |
Delta del Orinoco | 468.0 | ||
Golfo de Paria | 451.5 | ||
Río San Juan | 413.1 | ||
Río Limón–Isla San Carlos | 90.3 | ||
Bahía Morrocoy | 45.0 | ||
Ciénaga Los Olivitos | 40.0 | ||
Laguna Tacarigua | 39.0 | ||
Isla de Margarita | 23.4 | ||
Península de la Guajira | 20.3 | ||
Delta Yaracuy | 15.0 | ||
Maracaibo (costa este) | 9.2 | ||
Puerto Cabello | 7.0 | ||
Boca de Aroa | 3.0 | ||
Laguna Cocinetas | 2.7 | ||
Maracaibo (costa oeste) | 2.6 |